SANTUKAS DE FUEGO

Santuka de Fuego transforma la calle en un teatro donde explotan los sentidos…
En su larga trayectoria fue adaptando danza, canto, clown, melodía, maquillaje y vestuario al servicio del ritmo para ofrecer espectáculos integrales que se alejan del concepto de una simple batucada, siendo realmente interactivos, donde el contacto y la sorpresa con el público son protagonistas directos buscando en todo momento la participación y complicidad de la gente que se acerca.
Esta compañía forma parte del “MOVIMENTO SANTUKA” que se originó en Bajamar, un pueblo costero de Tenerife hace unos ocho años (donde todavía funciona con 25 integrantes), isla propicia donde las batucadas abundan por su afinidad con los mejores carnavales de España. Varios de los que estuvimos en su parto luego llevamos esa semilla a otras partes del globo y ya se formaron 5 batukadas del MOVIMENTO SANTUKA: SANTUKA TF en Bajamar (Tenerife), ORIGEN SANTUKA en Guanarteme (Gran Canaria), ESPÍRITU SANTUKA en Lanjarón (Granada), SANTUKA LIBERTAS en Minas Gerais – Belo Horizonte (Brasil)… y por último SANTUKA DE FUEGO de Extremadura, en el Casar de Cáceres… Desde que llegamos a Extremadura seguimos agregando otros matices a las bases de batucada. Por lo que se generó BATUKLOWN: mezclando técnicas de payaso con batucada.
La madre de todo este movimiento es LA SONORA DE ATALAYA, la comparsa Argentina de la cual surge el poder percutivo del MOVIMENTO SANTUKA…



















CASA DE MUÑECAS DE HENRIK IBSEN- COMPAÑIA DE TEATRO DEL NORTE (ASTURIAS)

NAVE DEL DUENDE
 EN 
CASAR DE CÁCERES

CASA DE MUÑECAS de Henrik Ibsen 
Compañía: Teatro del norte ( Asturias) 

He sido la muñeca de tu casa, como fui la muñeca en casa de mi padre. 

Te casaste conmigo, me trajiste a tu casa y pasé, sin darme cuenta, de las manos de mi padre a las tuyas. Y aquí era lo mismo: todo se arreglaba según tu gusto. Yo estaba siempre de acuerdo contigo, o lo fingía He vivido para divertirte cuando necesitabas distracción, y he callado cuando venias cansado, para no molestarte. Eso es todo lo que se hacer estar alegre o callar. Nunca he sido feliz aquí. A veces creía serlo, pero ahora comprendo que me engañaba. Nunca he sido feliz aquí… nunca… Ya ves lo que ha sido nuestro matrimonio, nuestro hogar: una casa de muñecas. Tú y mi padre habéis cometido un gran error conmigo; sois culpables de que no llegara a ser alguien. 

Nora 


Nuestra sociedad es masculina y hasta que no entre en ella la mujer no será humana. 
Ibsen 



Casa de Muñecas se estrena el 21 de Diciembre de 1879 en el teatro real de Copenhague y con esta obra podemos decir que comienza el teatro moderno. Nora, como la gran mayoría de los personajes de Ibsen, no se conforma con vivir una vida cotidiana con sus alegrías y sus contratiempos. Necesita una misión que realizar, un proyecto que se encuentra por encima de sus fuerzas, pero un proyecto que le permite imponerse a los otros, que le permite no cumplir las normas de la moral, que le permite ser, finalmente, ella misma y poder desenmascarar así la mentira en que se ha vuelto su vida. Nora es una muchacha educada para llevar una venda en los ojos y que sirve de juguete a su padre y a su marido. Cuando se le cae la venda, porque ama y lo arriesga todo para salvar ese amor, la imagen que tiene de si misma da un vuelco fenomenal y aparece, la gran innovación que establece Ibsen para fundar el teatro modero, la acción interior. Nora, al descubrir su mentira vital, al descubrir su verdadero yo frente a lo que simula ser, se convierte entonces en una persona decidida y capaz de luchar para demostrar que las mujeres pueden ser libres e iguales a los hombres, incluso superiores; para demostrar que hay que luchar para romper las mentiras, para defender las ideas, aunque la mayoría de las veces, por desgracia, nos sintamos solos, incomprendidos y al final derrotados, pero orgullosos de haber intentado ese viaje para conseguir llegar a demostrar que somos alguien. 

Etelvino Vázquez 


Dramaturgia y Dirección: Etelvino Vázquez 
Interpretes: Cristina Lorenzo, David González, y Etelvino Vázquez